Cuento Macabro # 1




Maruja Gonzáles no sabía que estaba embarazada hasta el séptimo mes de gestación, cuando su esposo, con una patada voladora le desangró la panza y deformó la cabeza de su hijo nonato. Como no paraba de sangrar, su vecina, Trinidad la llevó a rastras a la posta de la esquina, donde la atendieron sin ceremonia y al cerciorarse de que estaba en estado, le sugirieron que fuera al Hospital General, y así fue como Maruja se enteró de que su hijo Cayetano estaba en camino. 
La criatura nació cinco semanas después con el sudor de su madre, sin embargo la matrona y la propia Maruja pensaban que el bebé no sobreviviría mucho tiempo por las inclemencias de la vida y la prematuréz de su caso. Sin embargo, el niñó nació flacucho y lánguido pero con pulmones fuertes que avisaban en toda la casa que había nacido.

La primera infancia y su niñez no fueron fáciles, siendo el séptimo hermano. Todos oscilaban entre 2 a 12 años, así que Cayetano tuvo que acostumbrarse a ser el último y ello conllevaba tener menos privilegios que los mayores, como ser: menos raciones de comida, ropa grande, gastada y usada y poder asistir sólo a la primaria, donde el niño mostró interés por la Ciencia y odio por las Matemáticas.

A los 9 años, Cayetano decidió dejar la escuela para siempre y comenzó a pedir limosna en todas las cuadras de la ciudad. Caminaba ágil como cervatillo, y de la misma manera aprendió a ser tan rápido, que -cuando cometía algunas fechorías como robar-, nadie se daba cuenta.

Cayetano siempre fue de explorar, y le gustaba mucho entretenerse con hojas secas y animales muertos, ratas, gatos, que abundaban por donde vivía. Sentía una satisfacción enorme al examinarlos de pe a pa, llegando a veces, a disecar perfectamente los cuerpos inertes de los animalitos. El papá de Cayetano tenía la infame labor de matar a los perros callejeros, y salía con el chofer del camión destartalado a "cazar" como él decía, a "todos esos malditos perros que jodían la vía". Bajaba del camión, los acorralaba y los mataba ahí, delante de quién viera, cosa que no gustaba mucho, por lo que varias veces recibió notificaciones sobre el deber de asesinar a los perros en las instalaciones de la Perrera Municipal, lugar infame, donde asediaba la muerte y las moscas. Así fue que Cayetano comenzó a acompañar a su padre a eliminar perros y gatos, descubriendo así su gusto por la muerte y los chillidos caninos. Sin embargo, al tiempo decidió no acompañar más a su padre, ya que le aburría la muerte animal, él quería más.

A los 12 años, Cayetano logró llevar con engaños a su vecino de tres, Lorgio Sarti a un lote baldío, donde, después de meterle los dedos a los ojos y hacerlo llorar, decidió empujarlo entre unas espinas y escapar del lugar, mas no tuvo suerte puesto que un señor los vio y obligó a Cayetano a llevar al niño Lorgio a su casa y luego ir a su propia casa, donde el señor explicó lo sucedido a la madre de este. Una vez que el señor se fuera, la madre de Cayetano pretendía golpearlo, cuando se escuchó un grito afuera, y al ver quién era, vieron que el padre de Lorgio denunciaba el hecho, y pedía que el responsable saliera de la casa. Maruja intentó suavizar la situación, pero el padre de Lorgio anunció que llamaría a las autoridades, cosa que Maruja no quiso, entonces decidió que Cayetano pidiera disculpas..., pero no pidió disculpas, ya que el padre de Lorgio no lo dejó hablar y los golpeó en los ojos dos veces, lo insultó y lo dejó en el piso.

El padre de Cayetano nunca se enteró, y si lo hizo, no se manifestó.

Una semana después, Cayetano se encuentra con Isabel Moya, una niña de cuatro años de edad que se encuentra jugando en el barro cerca de su casa. Cayetano se le acerca y la convence de ir a otro lugar, donde comienza a golpearla con una piedra y, para evitar que llore, le llena la boca de barro. Isabel comienza a ahogarse y el niño asustado, decide golpearle la cabeza más fuerte, una vez que ha terminado, esconde a Isabel debajo de unas ramas y escombros y retorna a su casa. El cuerpo de la niña es encontrado una semana después y no hay ninguna pista.

Un año después, cuando Cayetano cumple 10 años, intenta quemarle los párpados a una primita de diez meses, esta vez no pasa desapercibido, y la mamá de la criatura lo denuncia a la policía, pero como es un niño, solo le dan una advertencia.

Unas semanas después, Cayetano se encuentra jugando entre varios niños cuando reconoce a María Rosa Paz, una niña del barrio, a la que luego de convencer lleva a un lote baldío, donde intenta estrangularla, pero sin éxito, entonces decide enterrarla viva en una zanja que luego cubre con latas. El cuerpo de María Rosa es encontrado dos días más tarde y tampoco hay sospechoso.

Pocas semanas después, la madre de Cayetano decide llevar a su hijo a la Policía, luego de encontrar bajo la cama de este, una caja llena de partes de gatos mutilados, además de encontrar la cabeza de varias aves en sus zapatos. Sin embargo la policía nada puede hacer, más que advertirle que no lo vuelva a hacer. Es aquí cuando Cayetano define su nueva identidad de criminal, a los 10 años de edad, sabiendo que no puede ser encarcelado por ser niño, se siente a sus anchas.

Cuatro semanas después, a la salida del colegio, Cayetano invita a Severo Ramírez de ocho años un dulce y decide llevarlo por un lote baldío  Una vez que se encuentran allí, Cayetano procede a estrangularlo con las manos, pero Severo lucha por su vida y casi lo logra, a no ser porque Cayetano consigue una piedra y lo golpea tan fuerte que lo deja inconsciente. Cayetano luego decide machucarle los dedos a Severo y lo entierra vivo en una zanja. Sin embargo, esta vez los crímenes del niño comienzan a tener un tinte más macabro, ya que tras cometer el asesinato Cayetano se masturbara, haciendo que el placer sexual y el placer sádico se junten.

Varias semanas después, el niño decide quemar al perro de la familia. Cuando la madre logra ver al can salir disparado hacia la calle, decide que ya es suficiente y lleva a Cayetano a la policía, confiada de que esta vez hagan algo con el inmanejable niño, puesto que, -dentro suyo- Maruja sospecha que su hijo anda detrás de los asesinatos. 
Esta vez la policía decide enviar al niño a un reformatorio de menores donde es retenido tres años. Ahí Cayetano aprende a drogarse y su mente sigue aferrada en el deseo compulsivo de matar, es así que, cuando lo dejan libre a la edad de 13 años, el adolescente deja la casa familiar y pronto se encuentra viviendo entre drogadictos y prostitutas.

Un día, Cayetano divisa a Samuel Gómez, niño de siete años que juega fuera de su casa, Cayetano persuade a Samuel a ir con él y una vez que se encuentran en un lugar apartado, Cayetano golpea y viola al niño, y una vez que lo deja botado en una esquina, procede a clavarle un clavo de 10 centímetros en la sien con una pierda. El niño muere.

Al día siguiente, Cayetano intercepta a Luis Benítez de seis años de edad. Con un caramelo logra llevarlo a un lugar apartado donde lo sodomiza y viola, para luego ahogarlo en un riachuelo poco profundo, pero es visto por un campesino. Cayetano huye, el campesino saca al niño casi muerto del río y da parte a la policía.

Poco tiempo después, Cayetano es reconocido y acusado de vejación e intento de homicidio, y lo vuelven a enviar al correccional de menores. Una vez dentro, se decide a hacer un examen psicológico y psiquiátrico al adolescente, donde se establece que el chico tiene Personalidad Sádica y Personalidad Antisocial, enfermedades mentales que justifican su ataque. 

Después de varios meses dentro, Cayetano entabla amistad con un psicólogo al que eventualmente le cuenta sobre todos sus asesinatos y ataques, contando detalles estremecedores de frases que sus víctimas lograban formular en un intento de salvar su vida y es así que el psicólogo decide revelar la verdad a las autoridades del correccional y como la fama de Cayetano crece, mas se decide a inculparlo como adulto, y algunos meses después es enviado a una cárcel de máxima seguridad en el Sur, donde es asesinado por los otros reos a golpes a los pocos días de su llegada por haber matado al gato mascota de la prisión.




*Historia inspirada en hechos reales



Comentarios

  1. Lo mejor es que lo matan por matar al gato jajaja excelente final!!!! :D

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

La Pequeña Gran Democracia

Sois un Gilipollas

Hoy